1 de marzo de 2012

Un nuevo proyecto

Como comentaba en la última entrada, en esta edición del Reto Blogger hemos identificado unos retos personales que debemos cumplir antes de final de año para poder optar a ser los ganadores. Además, en los meses pares daremos cuenta de nuestra evolución al respecto.

Así, tras hacer los cálculos correspondientes en Excel, parece que Febrero es el pimer mes par del año, por lo que creo que en primer lugar debo explicar en que consiste mi reto personal: me gustaría iniciar un segundo proyecto empresarial. En cuanto a cómo de "iniciado" debe encontrarse el nuevo emprendimiento para dar mi reto por cumplido, es algo que dejaré al buen criterio de los miembros del Reto: haber constituido la sociedad, tener un plan de negocio, encontrar los socios adecados, iniciar la facturación...

Consecuentemente, esto implica que DEPORR ya debe tener unos ingresos sólidos y constantes y tener una cierta estructura en su funcionamiento y en su crecimiento que me permita acometer otras iniciativas. Esto casi son tres retos en uno...


Ahora mismo tengo varias ideas respecto a qué me gustaría desarrollar, que después hay que pasar por el cruel filtro de las capacidades de cada uno, la inversión necesaria, el estado del arte de la competencia y el mercado, etc. No se trata de hacer un plan de negocio, al menos en un primer momento, sino más bien de plantearse muchas muchas preguntas de sentido común y no dejar de mirar al mercado. Por otra parte, como ya he comentado con anterioridad, creo que para levantar un proyecto innovador desde cero, en la actualidad tienes más ayudas que nunca (información, infraestructuras, tecnología) pero creo que también es más difícil que nunca porque todos tenemos las mismas facilidades, desde Faro hasta Manila. Hace 20 años un proyecto mediocre podía levantarse y llegar a ser una empresa de éxito. Hoy en día creo que eso no es posible. La selección natural en el ecosistema empresarial se ha acelerado por la multiplicación de la oferta y la cercanía de tus competidores. A veces me lo imagino como un equilibrista caminando sobre el vacío, en donde sólo necesitas un paso en falso para caer. Claro que existe Facebook, Twitter, Google, Zynga... pero lo que nunca sabremos es cuántos proyectos que tenían una idea no tan buena como Twitter cayeron, o cuántos su producto no estaba tan maduro como Facebook se quedaron por el camino, o el número de empresas que tuvieron demasiados reparos morales en un primer momento que otros no tuvieron, etc. etc.

En cuanto a los sectores que me parecen atractivos me siguen interesando la biotecnología o la energía, aunque son dos opciones que debo dejar de lado de momento porque implican altísimas inversiones y un socio tecnológico de calidad a quien todavía no tengo el gusto de conocer.

Otro sector que llevo años observando y creo que tiene aún mucho recorrido en España/Europa es el de los comparadores financieros. En USA, me encanta como Mint se ha quedado con el mercado, con un producto enfocado por encima de todo a ofrecer valor añadido al cliente. También creo que además de replicar el modelo aún se pueden hacer más cosas...

Como una manía personal, me gustaría ayudar a hacer de este mundo un lugar mejor evitando que tengamos que llevar nada en los bolsillos. No se vosotros, pero yo lo primero que hago al llegar tanto a casa, a la oficina o a cualquier lugar donde tenga un poco de confianza es "aparcar" toda la chatarra: llaves de casa, del coche, la cartera que abulta como una tortuga de las Galápagos, el móvil y la calderilla como mínimo. No hago más que pensar en cómo se reirán nuestros hijos cuando piensen que durante años teníamos que ir cargados constantemente con objetos cuya función es ínfima comparada con lo que abultan. No tengo ni idea qué sustituirá a las llaves en el futuro: escáner de iris, digital, reconocimiento de voz, contraseña, chip RFID bajo la piel, teclado... pero por favor que llegue cuanto antes. No se por qué, pero me siento como si de repente mi móvil fuera un Nokia 6100 y mi conexión de internet conectara con un modem a 56 K, me darían ganas de gritar "¿Pero todavía estamos así? Hay un mundo mejor y yo lo he visto, no estoy loco". De momento, parece que a corto plazo tendremos que conformarno con pagar con el móvil y con Google Wallet para aligerarnos un poco los bolsillos.

Un área que sin duda le esperan unos años gloriosos es el futuro de la televisión. Después de años con la cantinela de que se iba a acabar la caja tonta, estamos a punto de que realmente la TV se convierta en un canal bidireccional. Parece que la forma en la que se va a desarrollar es replicando los ecosistemas de aplicaciones de AppStore, Android y demás. Un tema muy muy interesante, porque todos tenemos una televisión casa con una pantalla varias veces la de los teléfonos o tabletas, que además posee un componente social mayor (puedes interactuar con la tele acompañado, pero es difícil que más de uno lo haga con el teléfono o tableta).

Por último, hay otro sector que no conocía y que lo he hecho a través de la posibilidad de participar en un proyecto de la mano de unos amigos. Como no se si dispongo de su permiso para hablar de ello, de momento lo dejo aquí, pero espero ampliarlo en el futuro.

Quiero emprender un nuevo proyecto y hay muchas opciones interesantes, ninguna a priori sencilla...perfecto!










31 de enero de 2012

Resumen del año

Hola de nuevo, mis apreciados y poco atendidos lectores...

Casi ha pasado un año desde mi última entrada, por lo que en este primer post del año y que marca el inicio de mi participación en el RetoBlogger 2012, me parece adecuado hacer un pequeño resumen de lo sucedido hasta ahora. 

Empezando por el mismo Reto, este año se presenta, de nuevo, con novedades en su funcionamiento. En esta edición vamos a realizar 12 posts a lo largo de todo el año, por lo que -como muchos ya habréis deducido como mentes preclaras que sois, hecho demostrable puesto que estáis leyendo este blog- realizaremos un post al mes. De estos posts, los correspondientes a los meses impares serán de temática libre y aquellos de los meses pares tratarán sobre la evolución de un reto personal que hemos definido cada uno para este año 2012. De esta manera, esperamos que al finalizar el año, con el último post demos cuenta del éxito en cada uno de nuestros retos. Entre aquellos que hayan conseguido realizar su reto personal el ganador será el que tenga mayor puntuación, pues los post mensuales vienen votados por el resto de miembros del Reto a lo largo del año. 

Así pues, este año no habrá eliminaciones parciales, sino que todos participaremos hasta el final, se quitan las temáticas comunes, y se incorpora el concepto de reto personal. Veremos que tal resulta después del apagado fin de curso del año pasado.

Cambiando de capítulo, el tema laboral se ha presentado especialmente movido este año. Empecé el año como director general de Synergia Bio, una empresa de biotecnología dedicada al estudio/cultivo/explotación de cultivos energéticos (especialmente Euphorbia latyris para Repsol). A pesar de que todas mis alarmas se activaron ante la idea de volver a trabajar en proyectos de biotecnología en España (poco dinero, muchos egos), el cruce de caminos en el que se desenvolvía la empresa -biotecnología, agricultura, energía- me atraía poderosamente. Sin embargo, antes incluso de cumplir el primer año salí espantado de la misma. No sólo cumplia con los tópicos de manera acentuada sino que Synergia Bio es sobre todo un vehículo de enriquecimiento de sus socios. Esto no me parecería mal en absoluto si no fuera porque los caminos que se han seguido incluyen el desvío de subvenciones públicas mediante prevaricación, apropiación de fondos públicos por medio de terceras empresas y falseamiento de datos científicos clave para los clientes industriales. Por desgracia para mí, mis convicciones morales hacen este tipo de empresa incompatible conmigo. De ahí mi rápida salida (avisando con los tres meses habituales en dirección), donde con gran estilo y señorío no faltó el impago del último mes de servicio. Desde aquí todo mi cariño para los socios, los hermanos Carlos Vera y Pablo Vera (del CSIC, como está el patio...), a los que deseo todo el éxito que se merecen.

El caso es que el mismo día (bueno, vale, un poco antes...) que terminé en Synergia Bio, tuve claro que ya era el momento de perseguir -por qué no decirlo- mis sueños sin tomar más desvíos, que como adelanté en algún post pretérito en este mismo canal consisten en llegar a ser un VC (venture capitalist o resumiendo muchísmo: inversor en start-ups) por mis propios medios. De esta manera, me estoy dedicando a tiempo completo a DEPORR, que ha de ser la primera piedra de mis sueños... (espero que aprecieis la metáfora basada en elementos antagónicos).


Por último, y lo más importante, en el aspecto familiar este ha sido el año más feliz de mi vida. Y es que el 6 de enero vino al mundo mi hija Paula, que no ha dejado de alegrarme el corazón ni un solo día. Después de un año con ella, mi mayor temor no es otro que según vaya creciendo y se convierta en una niña, algún día pueda llegar a olvidar cada uno de los momentos que nos ha regalado a mi mujer y a mí. Otros padres con hijos más mayores nos han dicho que según los niños van creciendo van cerrando etapas y convirtiéndose en distintas personitas. Así que, aquí es donde entra este blog, para servirme de sencillo registro escrito de algunos de esos instantes que no quiero olvidar nunca, más allá de películas y fotos que nunca capturan el momento preciso, cotidiano y auténtico...

A lo largo de este año, Paula se ponía de pie y se caía continuamente en el hotel del verano pasado para jugar con una bandeja de fruta de una mesita baja (bendita moqueta), aprendió muy pronto a hacer pedorretas y fue muy generosa a la hora de repartirlas, le encantaba hacer el torpedo en la bañera vertical tummy-tub, se parte de risa cuando me escondo detrás del sillón y le doy sustos, se queda como cataléptica en los paseos en sillita, últimamente le ha dado por peinarnos a todos y a si misma con las manos, el cepillo u otro objeto que pase por allí, empezó bailando música moviendo los brazos arriba y abajo pero en seguida pasó a menear el culete arriba y abajo, al principio de las papillas había que engañarla con el chupete entre las cucharadas para que no llorara, por supuesto le encanta hablar por el móvil, tocar "el" botón del iPad y manejar el mando de la tele o de las persianas o del ventilador apuntando propiamente, le chifla pasar por la oficina y pegar y despegar imanes, trepar por el escabel, abrir los armarios y meterse en una caja y que la deslice por el suelo a toda velocidad, muy pequeñita empezó a dar "besos": aplica la boca en tu mejilla y hace un ahh húmedo, se ríe sin dientes cuando le quito el pañal y le digo snif, snif, ¿tienes pis?, ahora cuando está en el coche en marcha hace un gorjeo ininteligible de alegría (que solo dura unos minutos, en seguida se quiere bajar de la sillita), desde hace meses, cuando alguien tose ella también y se pone muy seria, cuando le hice los ejercicios para que se quedara dormida sola en su cuna, se incorporaba una y otra vez, hasta que muerta de cansancio se desplomaba y quedaba en las posturas más absurdas (y tenía que colocarla sin reírme para que no se despertara y volviéramos a empezar), en la bañera hace burbujas y le pone jabón a la muñeca y se lava la cabeza (de momento solo por los lados), le gusta cogerme de las manos para que la lleve andando deprisa, deprisa, y baja la cabeza de la velocidad que alcanzamos, es experta en cerrar puertas y si le decimos, cuidado con los deditos, después de cerrar intenta meter el dedo en la ranura, abre muy bien los cajones de las mesillas y saca todo el contenido de una manera muy metódica y lo lleva a quien esté más cerca, con las maletas sin embargo no es tan cuidadosa y esparce el contenido por el suelo muy rápidamente, como si le molestara que la ropa esté dentro, ha descubierto que el biberón del agua es más divertido cuando se pone boca abajo sobre el suelo, desde hace un par de semanas ya quiere coger ella la cuchara al final de la papilla con un ratio 25/75 boca/cara, no se por qué cuando le pongo la ropa y contamos los deditos a ver si están todos me muerde un dedo, cuando se despierta y ya no quiere dormir más, hace lanzamiento de chupetes fuera de la cuna, pero si la coges en brazos, se preocupa de tirarlos dentro, le gusta mucho llevarte un cuento y que veas con ella dos o tres páginas, luego se aburre, aprendió a caminar con la ayuda de un cochecito que iba empujando por la casa, que compramos para que dejara de empujar sillas de un lado a otro, el bidé fue un gran descubrimiento que parece que ya ha perdido su atractivo, igual que los enchufes, en el baño del pasillo siempre quita y pone varias veces la lamparita barbapapa de su soporte y casi siempre toca el tambor en la caja de hojalata que está al lado, ya casi nunca coge su cesto de la ropa sucia y lo vacía en la bañera, soltando un ohhhh con cada prenda que cae, cuando se hace muy tarde jugando y le entra sueño, a veces te coge de la mano y te lleva a su habitación para que tomes las medidas oportunas, después de dos caídas desde nuestra cama, mi mujer le enseñó a bajar -de culete, Paula, baja de culete- con una técnica muy perfeccionada, su vocabulario actual incluye apá (papá), má (mamá), amá (lo quiero), ehh (no), tá (Sera, la perrita), aya (hola) e ita (abuelita), por cierto le encanta tocar a Sera en el lomo y las pezuñas, pero la perrita no lo tiene muy claro, en verano disfrutó mucho con el agua, en la piscina, en la playa y con una manguera...

En fin, desde los lloros acompasados de los primeros días hasta perseguir a Sera por la casa y meterse detrás de ella debajo de nuestra cama, han pasado 12 meses y medio. Me entristece que ella no vaya a recordar todas las aventuritas y juegos de este año, así que aquí quedan muchas de ellas para que quizá algún día ella lo lea y yo no lo olvide nunca.